sábado, 28 de septiembre de 2013

El ecosistema de Sony

Resulta que soy un gran mentiroso.  Ante una oferta que no pude rechazar, me compré un PlayStation Vita. En noviembre, me voy a comprar un PS4. 

Es impresionante la vuelta que Sony silenciosamente le esta dando al Vita. Después de lanzar a un precio alto ($250dlls) y con juegos que parecerían repetir el error de querer hacer versiones portátiles de juegos de consolas, el Vita tiene una cantidad decente de juegos que valen la pena. Muchos de ellos son indie games que puedes bajar en PC pero tenerlos en la palma de tus manos es una experiencia muy distinta a la de jugar frente a un monitor. 

Parte de lo que alegue hace unos meses cuando escribí ese último post es que la mayoría de los juegos populares no me llaman la atención o repiten la misma formula de éxito comercial de siempre. Resulta que estaba buscando innovación en los lugares equivocados. Existen increíbles juegos que no tienen la presión de vender millones de copias en su primer semana en computadoras y hasta cierto punto en tabletas o teléfonos. Es precisamente ese tipo de innovación que está distinguiendo los aparatos de Sony, mientras que Microsoft y Nintendo también tratan de llevar esos juegos a sus plataformas. 

Por lo pronto, la promesa de poder jugar todos los juegos de PS4 en el Vita a través de Remote Play me ha convencido. Aunque falta escuchar el argumento completo de los recién anunciados Steam Machines...